El ave tragafuegos (火喰い鳥, Hikui Dori), también conocida como ave comefuego, es uno de los animales que aparecen en Dragon Ball, y uno de los pocos personajes de relleno del anime que se sabe que han sido diseñados por el mismo Akira Toriyama. Se trata de una rara y casi extinta ave que habita en la Montaña Kiwi, y que se alimenta de las llamas.
Historia[]
El ave tragafuegos fue objeto de estudio de un viejo científico de 70 años. El científico viajó al Monte Kiwi, donde se encontraba el último huevo del ave tragafuegos, y lo mantuvo hasta el día en que nacieron.
.png){kind=link}
En el Daizenshuu[1]
Goku y Chi-Chi encuentran un libro escrito por el Maestro Roshi, una vez escribió un libro que afirma que las plumas del ave tragafuegos se debe recolectar con el fin de crear el Ventilador Bansho, pero luego admite que él sólo escribió que para impresionar a las chicas. Sin saber la verdad, Goku y Chi-Chi fueron al monte en busca de Kiwi las plumas del ave para crear el legendario Ventilador Bansho y apagar las llamas en la Montaña de fuego del Rey Gyuma.
Cuando la última ave tragafuegos con vida apareció, rompió la cáscara de huevo propia para ayudar a la escotilla cachorro. Después de eso, tanto el adulto y el cachorro miró a Goku, Chi-Chi y el viejo científico durante unos segundos (probablemente como su propia manera de darles las gracias por el cuidado de los huevos) antes de salir del volcán y desapareciendo en el cielo. El ave tragafuegos adulta deja algunas plumas por detrás, pero acaban por desaparecer cuando Goku y Chi-Chi intentaron atraparlas.
El Emperador Pilaf también sabía sobre el ave tragafuegos y se fue al Monte kiwi para robar el huevo y luego lo venden por mucho dinero, pero Goku detuvo sus malvados planes Pilaf y él, Shu y Mai tuvieron que huir de nuevo.